Fuentes de ideas para emprender
En países con alta inflación como Venezuela una buena estrategia es ofrecer productos similares a otros existentes, pero más baratos.
Un grupo importante de venezolanos ha decidido que emprender sea su principal actividad económica. Según investigaciones del Instituto de Estudios Superiores de Administración (Iesa), 2,7 millones de personas se catalogan como emprendedores en el país.
Ahora, muchos de esos sujetos se definen de esta forma solo porque tienen ideas de emprendimiento, sin embargo, esto no basta para que puedan ser calificados con este rótulo.
El emprendedor es el que ejecuta su idea y la materializa corriendo riesgos. Eso significa tiempo, sacrificio, dinero y mucho esfuerzo.
Otro grupo de venezolanos se cataloga como emprendedor porque quiere emprender, pero no está seguro de cuál será la naturaleza de su proyecto y está tras la pista de una idea de negocio. A este último grupo de personas va dirigido el presente artículo, en el cual vamos a analizar potenciales fuentes de ideas de emprendimiento.
Según las teorías del profesor de emprendimiento Raphael Amit de la Universidad de Pennsylvania (Wharton), hay dos preguntas críticas que deben realizarles los emprendedores a sus potenciales clientes cuyas respuestas develarán oportunidades de emprendimiento. Estas preguntas son: ¿qué quieren sus potenciales clientes que los competidores actuales no les ofrecen? y ¿qué les molesta a sus potenciales clientes de los suplidores actuales?
Las repuestas a estas preguntas nos revelarán oportunidades para emprender que responden a necesidades insatisfechas por los competidores, productos y servicios que existen actualmente en el mercado.
A lo largo de mi vida he estudiado los modelos de negocio en los que se basan los emprendimientos exitosos. Estos modelos son:
Ofrecer productos que satisfagan una necesidad que no ha sido cubierta por productos existentes en el mercado. Los teléfonos celulares son un ejemplo de un producto que satisface una necesidad de comunicación insatisfecha en el mercado.
Ofrecer productos similares a productos existentes en el mercado a un menor precio. Este modelo es particularmente exitoso en países con alta inflación como Venezuela, donde los consumidores se ven obligados a adquirir productos más económicos por la pérdida del poder adquisitivo de sus ingresos. Los medicamentos genéricos son un ejemplo de este tipo de productos.
Importar modelos de negocio o productos de otros países que no han sido establecidos o comercializados en el país. Farmatodo es un ejemplo de este modelo de negocios, ya que ellos desarrollaron el concepto de farmacias autoservicio en Venezuela. Un modelo de negocio similar a los conceptos de las tiendas Walgreens y B&J Pharmacy en Estados Unidos.
Conformar un negocio similar a uno existente -me too- en un segmento de mercado donde la demanda es mayor que la oferta y puede coexistir otro suplidor. La aparición de las franquicias Recárgate para competir contra la franquicia Dr. Cartucho es un ejemplo de este modelo, ya que la demanda era superior a la oferta de la franquicia Dr. Cartucho.
Replicar modelos de negocios que han probado ser exitoso mediante la adquisición de franquicias. Ejemplos de este modelo son las aproximadamente 500 empresas franquiciantes en Venezuela como McDonald’s, Juan Chichero, entre otras.
Replicar un modelo de negocio exitoso que no se ha establecido en una región geográfica determinada. Un ejemplo de esto sería llevar el reparto de pizzas a domicilio a una ciudad del país donde no exista ese servicio.
Comprar una empresa en marcha para aprovechar su experiencia gerencial, su base de clientes, suplidores, modelo de negocio, etc. Este modelo es particularmente efectivo cuando los compradores de la empresa traen algún recurso necesario para el éxito o para mejorar los resultados de la empresa que están comprando. Estos recursos pueden ser capital, capacidades gerenciales, relaciones y clientes.
Por ejemplo, un grupo de inversionistas, encabezado por el empresario argentino Andrés Guzmán, concretó la compra de la empresa Vencerámica para garantizar su continuidad operativa y, asimismo, honrar los compromisos adquiridos con trabajadores y acreedores.
Todas las ideas de emprendimiento deben ser sopesadas con amigos, colegas y asesores. Estudios de la consultora McKinsey & Company demuestran que por nuestra naturaleza humana tendemos a ser demasiado optimistas sobrevaluando nuestras capacidades, sobreestimando el tamaño del mercado potencial, sobrestimando la aceptación de nuestros clientes y subestimando la respuesta competitiva.